Un triunfo gestado a puro fútbol
El equipo Herediano se sacudió de las fuertes críticas que cayeron en los últimos días luego de que obtuviera un punto de nueve disputados. De las críticas que hasta muchos llegaron a apuntarlo como un equipo tímido por no obtener un solo remate a marco en el último partido ante San Carlos.
Ante esas críticas, el Herediano llegó herido al Fello Meza a enfrentar al equipo Alajuelense, llegó en silencio pero con la convicción de poder ganar, de ganar jugando bien para borrar dudas y ganar credibilidad.
El objetivo lo cumplió, lo hizo con creces, sin objeción, triunfando merecidamente 1-3 ante los manudos. Apeló al fútbol simple, directo, efectivo y devastador.
La victoria se edificó desde el primer minuto de juego con la presencia de Andy Furtado, Oscar Briceño y Andy Herron en el ataque, quienes inquietaron y atemorizaron a la zaga liguista. Con la dupleta Orúe y Acosta, encargados de asfixiar y destruir el juego manudo; y la creatividad, visión y movilidad de Cristian Blanco.
Fue al minuto 15 que Herediano pudo desquitar su ira, lo hizo cuando Cristian Blanco desde el sector izquierdo enviara un trazo al área y Andy Herron llegó a tiempo a la cita con el balón para meter la pierna derecha y cantar el primer tanto de la noche.
Apenas dos minutos después… ¡golazo! Andy Furtado, el goleador de la Selección Nacional le hizo honor al fútbol, se llevó el aplauso de propios y extraños por la joya de gol de anotación que acababa de conseguir. Cristian Blanco lanzó al área un servicio preciso de tiro libre y el goleador de taquito la envió al fondo de las redes. ¡Golazo! ¡Golazo! ¡Golazo!
Los integrantes del cuadro alajuelense no podían quedarse celebrando la gran anotación de Furtado, en su pecho tenía clavado dos dardos que lo llevaban a la muerte, por ello sacó fuerzas para responder y al 25´ descontó por intermedio de Jean Carlo Solozarno, quien solo frente al marco recibió un servicio desde la derecha para anotar el 1-2.
Para el complemento la dictadura florense siguió. El fútbol vertical y veloz le seguía haciendo daño a los liguistas, que no encontraban la formula para detener el avance rojiamarillo y para romper ese dominio que los tenía aturdidos.
Dos de los tres delanteros habían anotado para el “team”, faltaba Briceño, quien también tenía sed de gol. Fue entonces cuando el colombiano al 53´ se lanzó al frente, a pura fuerza avanzó llevándose la marca rojinegra y sacó un potente y colocado, remate que se anidó en la red del meta Pemberton y colgó el 1-3.
Con la ventaja de dos tantos, el banquillo florense se comenzó a mover, Paulo Wanchope envió al campo a Mauricio Solís en lugar de Andy Furtado para controlar aún más el medio campo, juntándolo con Acosta y Orúe. Después ingresó Leandrinho por Andy Herron y más tarde lo hizo Cunningham por Briceño, variantes que resultaron oportunas porque la liga no pudo armar su ataque desde atrás, porque estos dos veloces atacantes mantuvieron muy entretenidos a la zaga a puro “pressing”.
La historia en el segundo tiempo no cambió, Herediano fue igualmente superior que en la primera parte, lo controló y lo atacó cuantas veces pudo, pero faltó efectividad para seguir rompiendo la red.
El triunfo logrado fue un despertar oportuno porque evaporó los indicios de presión que estaban por desatarse por la falta de sumar de a tres puntos. Fue una victoria justa, gestada a puro fútbol.
Así jugó Herediano:
Adrián de Lemos, Roberth Arias, José Chan, Eduardo Gómez, Dennis Marshall, Bismarck Acosta, Bryan Orue, Cristian Blanco, Oscar Briceño (Kenny Cunningham), Andy Herron (Lendro Barrios 69´), Andy Furtado (Mauricio Solís 61´).
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